La semana pasada, el país le respondió al presidente Trump de varias formas. Fueron elecciones históricas ya que muchos candidatos elegidos fueron mujeres y personas consideradas “minorías”; personas que se parecen a ellos, rezan como ellos y aman como ellos.
Nueva York
En Nueva York, la candidata Alexandria Ocasio-Cortez, quien se identifica como Demócrata-Socialista, se ha convertido en la mujer más joven en ser elegida al Congreso, representando al Distrito 14 en Nueva York. Aparte de ser joven, es una Latina que representa no solo los valores de miles de inmigrantes y gente obrera, sino que también se conecta con los jóvenes, y representa una imagen distinta a lo que se puede llegar a hacer en este país.
Massachusetts
En este estado ha ganado Ayanna Pressley (D), convirtiéndose en la primera mujer afroamericana elegida al Congreso de los estados de la Nueva Inglaterra –región que componen los estados de las primeras colonias estadounidenses. Marca un logro no solo para los afroamericanos, sino también para personas que han sido marginadas históricamente en este país.
Nuevo México y Kansas
En estos dos estados, se han elegido a las primeras mujeres nativas: Deb Haaland en Nuevo México y Sharice Davids en Kansas. Haaland es miembro del Pueblo de Laguna de la región que ahora es Nuevo México. Davids es miembro de la Nación Ho-Chunk de Wisconsin, y aparte de ser nativa, se identifica como gay. Estas dos mujeres les ganaron a republicanos que han votado en contra de legislaciones que apoyarían a personas de la clase obrera.
Minnesota
Ilhan Omar se convertirá en la primera mujer musulmana elegida al Congreso. Omar, durante su campaña, sufrió discriminación por ser una mujer musulmana y por ser de Somalia; un país del cual el presidente ha hablado barbaridades. Omar, llegó a este país a los trece años y ahora representará al quinto distrito en el Congreso en Minnesota.
Tennessee
En un estado conservador como Tennessee, se eligió a la primera mujer al Senado, Marsha Blackburn, quien es del partido Republicano. Esto marca un punto especial en las elecciones ya que Blackburn se agrega a la lista de mujeres que tendrán asiento en la mesa redonda del Senado.
Un total de 273 mujeres formaban parte de la boleta electoral, más que el doble de mujeres hace diez años. Aunque estas elecciones han sido históricas por elegir a más mujeres congresistas. La Cámara y el Senado no representan a la cantidad de mujeres que viven en los Estados Unidos. Según un reporte de VOX, las candidatas a los diferentes asientos políticos, hablaron sobre la educación un 66.2% del tiempo en comparación con el 51.1% que los candidatos varones. Sobre los cambios al clima, las mujeres hablaron el 51.5% en sus discursos, contra un 41.6% que le dedicaron los hombres. El salario mínimo también fue un tema del que las mujeres hablaron el 37.3% del tiempo en contraste con el 25.5% de los hombres. Esto demuestra que las mujeres toman consciencia de los problemas que afectan a las personas a un nivel personal.
Lo que sí se puede observar en estas elecciones, es que el país, como en muchas otras ocasiones, ha respondido a una presidencia que podría convertirse en un régimen de derecha absoluta y fascista. Aún queda mucho trabajo por hacer para alinear a la política estadounidense en un sendero que trabaje para todos.